La paradoja de la fe y la prueba
Los impíos, según las citas presentadas, plantean el argumento de que es imposible demostrar la ausencia de Dios, ya que lo demostrable puede ser únicamente la existencia de algo, y negar la existencia de un objeto es similar a decir que no se puede demostrar que no entregué cinco rublos. Así, sus intentos de refutar las creencias religiosas se basan en una revisión crítica de los métodos de prueba, donde la falta de evidencias a favor de Dios se interpreta como una razón para no creer. Se enfatiza que, si sus convicciones estuvieran realmente fundamentadas, los ateos no evitarían experimentar con la fe; por ejemplo, no se negarían a someterse a la prueba del fuego, como se describe en el siguiente fragmento:"Y si el corazón es astuto, la persona empieza a dudar. Porque no se pueden presentar pruebas de que Dios no existe. Se puede demostrar que un objeto existe, pero demostrar que no existe, no es posible – no se puede probar que no entregué cinco rublos. Se puede demostrar que lo entregué, pero que no lo entregué es imposible; no se pueden encontrar testigos para ello. Por lo tanto, demostrar que Dios no existe es, en absoluto, una tarea imposible. La fe se demuestra de otra manera. Tomemos a dos personas: una cree en Dios, y la otra cree que no hay ningún Dios; una cree que Cristo es el Hijo de Dios, y la otra cree que Cristo es simplemente una figura histórica. Y ahora encendamos una gran hoguera y digamos a ambos: salgamos al fuego por nuestra fe. Pero ningún ateo, por la idea de que no hay Dios, jamás se arrojará al fuego, ninguno." (fuente: enlace txt)Además, los objetivos de los impíos a menudo son...