El Poder de Elevarse: Transformando Crisis en Crecimiento

A veces la vida nos presenta obstáculos y parece que se han agotado las fuerzas y la esperanza. Sin embargo, es precisamente en esos momentos cuando surge una oportunidad única para un ascenso genuino. En lugar de interpretar la crisis como un fracaso, se puede ver como una señal para aspirar a mayores alturas, como una invitación a combinar el movimiento hacia adelante con el ascenso. No se trata simplemente de superar barreras, sino de un vuelo deliberado en el que cada obstáculo se transforma en un peldaño hacia un nuevo nivel.

El mensaje principal es que las dificultades no son el final del camino, sino la plataforma de lanzamiento para el crecimiento interior y la superación. Los callejones sin salida en la vida pueden convertirse en el punto de partida para vencer nuestras propias limitaciones, cuando empezamos a utilizar nuestros dones y capacidades en todo su potencial. Es fundamental reconocer que todas las fuerzas necesarias ya están dentro de nosotros –quizás no siempre en abundancia, pero siempre disponibles para cambiar la situación. El apoyo sobrecogedor llega justamente cuando dejamos de esperar de manera pasiva y nos esforzamos activamente por transformar nuestras debilidades en nuevas fuerzas que nos impulsen hacia adelante.

En resumen, incluso cuando el camino parece bloqueado, la determinación de crecer y superar puede convertir nuestras dudas en decisión. Cada dificultad es una oportunidad para elevarse por encima de lo cotidiano y demostrar que los logros reales comienzan justamente en esos momentos en los que optamos por avanzar hacia arriba. Inspírate en los desafíos, utilízalos como valiosas lecciones y permite que tu ascenso interior se convierta en la fuerza que te ayude a superar cualquier obstáculo.

¿Cómo encontrar fuerzas para seguir adelante cuando todo parece desesperado?

Cuando parece que la fuerza se ha agotado y no queda esperanza, es importante recordar que en los momentos de callejón sin salida surge la posibilidad de un nuevo ascenso. Una forma de ver esta situación es considerar cada crisis como una señal hacia una aspiración superior: no solo avanzas, sino que simultáneamente te elevas. Como se dice:

"Cada aflicción, cada callejón sin salida en la vida es ese lugar en el mapa de la vida donde una señal indica la dirección: 'Hacia arriba'. ... Ahora, avanzar es posible únicamente combinando el movimiento hacia adelante con el ascenso. Es necesario elevarse, saltar, estirarse para superar el peldaño, y entonces, por un tiempo, será posible volver a moverse en el plano." (source: enlace txt)

Esto significa que, aun cuando el camino parezca bloqueado, siempre puedes encontrar fuerzas, ya que la aspiración no se limita a continuar, sino a perfeccionarte, elevándote por encima de las dificultades cotidianas.

También es esencial comprender que todas las fuerzas necesarias ya están dentro de ti, aunque a veces parezcan insuficientes para superar los problemas inmediatos. Esto se ilustra con la siguiente reflexión:

"Un hombre común decía: 'Desearía tener más fuerzas, pero Dios no lo permite'. Y no esperes a que te sean otorgadas, dice el eclesiástico Feofan, porque las fuerzas ya están presentes tanto en el cuerpo, como en el alma y en el espíritu. Sin embargo, no son completamente fuertes y requieren ayuda. Esa ayuda y apoyo es proporcionada por Dios, no como un excedente, sino para cada empresa actual. Se fortalece el hombre al intentar, y al no haber vencido, clama por ayuda, y llega la ayuda; una vez asistido, se retira, y el hombre permanece aún débil." (source: enlace txt)

Aquí se enfatiza que podemos contar con un apoyo superior, esa ayuda que llega precisamente en el momento en que la solicitamos. Esto no implica una espera pasiva, sino un esfuerzo activo por transformar nuestras debilidades en pasos hacia el crecimiento espiritual.

De esta manera, cuando todo parece desesperado, es crucial ver las dificultades como escalones que se pueden superar gracias a una fuerza interior y al apoyo que aparece justamente cuando más se necesita. Al aceptar el desafío y esforzarse no solo por sobrevivir, sino por convertir las pruebas en oportunidades de crecimiento, se pueden encontrar las fuerzas para seguir adelante, a pesar de lo desesperante que parezca la situación.