- 20.03.2025
Camino a la Imperfección: La Elección y la Caída Humana
Inicialmente, el hombre fue dotado de un don único: un principio creativo que reflejaba la imagen divina interior. En este estado primordial estaba presente todo el potencial, aunque este don en sí mismo no determinaba su ideal moral. Desde el principio, al hombre se le otorgó la imagen de Dios y alcanzar la semejanza moral se convirtió en el resultado de su libertad de elección y de sus esfuerzos espirituales.