Existe un amplio espectro de escenarios para el futuro de la Tierra, considerados tanto desde el punto de vista científico como filosófico. Por un lado, se reflexiona sobre las posibilidades extremas del desarrollo de las fuerzas productivas, preguntándose si la economía puede evolucionar hasta el punto en que el ser humano pase del oficio terrenal al rol de creador cósmico. Como se señala en una de las fuentes, “¿Pero cuáles son los límites para el desarrollo de las fuerzas productivas y, ¿existen? … Quizá, el hombre, contando con un soporte económico en el cosmos y siendo en él demiurgo, esté destinado a ser también cosmourgo, resucitador de la vida muerta, custodio de lo que existe y receptor de lo venidero?” (source: 9_44.txt). Esta reflexión filosófica subraya la idea de la transición de las formas económicas tradicionales a una nueva, hipotética “sobreeconomía”, donde las posibilidades del hombre se amplían significativamente gracias a la conquista del espacio.