- 20.03.2025
El Ser en Movimiento: Repensando el Alma
Las reflexiones modernas sobre la naturaleza del ser humano desafían las concepciones tradicionales de un alma inmutable. Nuestro "yo" interior puede verse como el resultado de la compleja interacción entre procesos corporales y mentales, en constante transformación, al igual que las reacciones bioquímicas que hacen de nuestro cuerpo un mecanismo dinámico y vivo. A medida que avanza la ciencia, se evidencia que las funciones físicas y mentales son inseparables, formando un cuadro integral de la personalidad, capaz de mantener su esencia incluso ante cambios físicos y pruebas mentales. Desde esta perspectiva, el ser humano no es una constelación de entidades estáticas con un alma separada, sino una unidad de procesos vivos, en la que el movimiento, la percepción y el pensamiento no solo nos acompañan, sino que definen nuestra existencia. Esta comprensión permite reevaluar los fenómenos del envejecimiento y la degradación: si la vida es un proceso que continúa incluso en momentos de declive, la idea tradicional del alma resulta superflua, cediendo lugar a una imagen dinámica del ser. Al concebir al hombre como una unión armónica de funciones indivisibles, se abre la posibilidad de entender en profundidad lo que lo hace un ser vivo y único.