El rápido cambio en el entorno laboral en los últimos tiempos ha abierto un área de oportunidades y desafíos innovadores. Aceleradas por las crisis globales, especialmente durante las recientes crisis mundiales, las empresas han reconstruido rápidamente sus prácticas de trabajo. Estas transformaciones han llevado a las organizaciones a adoptar modelos de trabajo ágiles que les permiten replantear el concepto de continuidad operacional e integrar el ámbito profesional y personal. Este cambio no solo ha ampliado los límites de los espacios de oficina tradicionales, sino que también ha cambiado la organización física del entorno doméstico, creando una conexión fluida pero exigente entre el trabajo y la vida personal.