La humildad se considera una de las cualidades más difíciles, porque requiere de la persona un profundo autoconocimiento, el reconocimiento de su propia insuficiencia y una lucha constante contra la tendencia natural hacia el orgullo y la vanidad.

El Reto de la Humildad

La humildad se considera una de las cualidades más difíciles, porque requiere de la persona un profundo autoconocimiento, el reconocimiento de su propia insuficiencia y una lucha constante contra la tendencia natural hacia el orgullo y la vanidad. No se trata simplemente de una manifestación externa de sumisión, sino de una transformación interior que ocurre a través del reconocimiento de las propias debilidades, el rechazo de la autoafirmación y la búsqueda constante de la humildad incluso en las circunstancias más difíciles.

Por ejemplo, una de las fuentes explica claramente que la humildad no surge automáticamente: requiere un proceso prolongado y, a menudo, doloroso de dominar el amor propio y el orgullo. En el texto se dice:
"Habiendo leído sobre la humildad, descubriste que en ti no existe ella, y en su lugar el amor propio te posee;

¿deseas aprender cómo alcanzarla?

A menudo se te presentan lecciones al respecto, aprende a humillarte ante las recriminaciones; pero esta virtud celestial no se adquiere sin esfuerzo y conlleva tiempo. No alcanzándola, aún más debes humillarte y reconocer tu propia pobreza, con el tiempo te humillarás..." (source: enlace txt).

Además, la adquisición de la humildad está vinculada a la necesidad de paciencia y a superar las dificultades de la vida, lo cual no siempre resulta fácil para la persona. En otro pasaje se enfatiza que para adquirir la verdadera humildad se necesita soportar no solo las adversidades externas, sino también las luchas internas contra el orgullo y el egocentrismo:
"Para que una persona ascienda al cielo, es simplemente necesario humillarse, acumular pobreza espiritual. Por lo tanto, soportando a sí mismo, soportando sus circunstancias y su pecaminosidad, la persona gradualmente... alcanza este estado dichoso: aprende a tener paciencia, y a través de la enseñanza de la paciencia gradualmente adquiere la humildad." (source: enlace txt).

Así, la humildad no es simplemente una pasividad sumisa, sino el consciente y prolongado dominio sobre el propio orgullo, una elección interna difícil que exige una lucha constante y un sacrificio personal. Esta cualidad se convierte en una prueba para el espíritu humano, ya que demanda el reconocimiento de la propia vulnerabilidad y un trabajo continuo sobre uno mismo, lo cual está lejos de ser fácil para todos.