El fundamento psicológico de esa creencia radica en una profunda convicción interior y en la fuerza de la esperanza, la cual transforma cada momento de la vida en un presagio de que todo se desarrollará tal como está previsto.

El Poder Transformador de la Esperanza Interior

El fundamento psicológico de esa creencia radica en una profunda convicción interior y en la fuerza de la esperanza, la cual transforma cada momento de la vida en un presagio de que todo se desarrollará tal como está previsto. La persona, que cree firmemente en la rectitud de sus puntos de vista y en la bondad de su camino vital, crea involuntariamente la expectativa de que el destino o algún orden superior conducirá inevitablemente al encuentro con la “persona indicada” justamente cuando sea necesario. Esta fe se convierte en una especie de fuerza predictiva, donde cada instante se percibe como una oportunidad ya dotada de significado y dirección, que nadie puede alterar.

Citas de apoyo:
"Cuanto más firme es la convicción del individuo en la corrección de sus puntos de vista y en la esperanza justificada en su voluntad y fuerzas, mayor es el poder de la fuerza de la esperanza, haciendo que cada momento se convierta en una realidad predictiva que nadie puede cambiar. Sobre esa base, el mundo y Dios permiten la interconexión de acciones y esperanzas. Por ello, la última esperanza siempre será la verdadera base divina de la existencia humana, la cual observamos en la forma más sublime de Dios: en la forma de amor y la fuerza de la libertad." (fuente: enlace txt, página: 3)